Este es un post de invitado de Adrían M. García.
Adrián me escribió hace unos días. Se presentó como arquitecto dibujante y me pasó su página de Facebook. Me quedé fascinado con lo que vi, así que no lo dudé ni un segundo y le pedí que si quería participar en el blog.
Muchos de vosotros me preguntáis si es difícil el dibujo artístico en la carrera de Arquitectura. En mi opinión Adrián es un maestro y está por encima de la media en esta materia; pienso que uno de sus puntos fuertes es su capacidad para representar atmósferas. Si te interesa el dibujo a mano, lee este artículo porque nos desvela trucos muy interesantes interesantes.
Os dejo con el artículo que ha escrito Adrián.
El dibujo arquitectónico
El dibujo es una herramienta fundamental para el arquitecto porque ejerce de intemediario entre el mundo del concepto abstracto y el mundo real, físico. La arquitectura nace de las ideas sin forma con las que queremos responder a necesidades que se nos plantean en el entorno, y es el arquitecto quien a través del dibujo, las moldea, expone, y construye. Dibujar significa transmitir.
Hoy en día existen programas informáticos con los que se puede dibujar y diseñar, pero nunca dibujar con ordenador puede ser más efectivo que a mano porque estos programas tienen ciertos límites, y si intentamos plasmar lo que tenemos en el cerebro a través de dichos programas, nos amarramos a esos límites y probablemente no obtenemos con precisión lo que buscábamos. Ya sea dibujando o incluso modelando una maqueta, el trabajo que construimos con nuestras manos siempre será más expresivo por el hecho de ser imperfecto. Suena contradictorio pero la precisión de diseñar con ordenador a veces perjudica a la precisión abstracta de nuestras ideas.
El dibujo, además de ser el medio transmisor de nuestros pensamientos, es fundamental también para poder traducir las ideas que proponen los clientes, y a ser posible, en directo, delante de ellos. Eso, por lo que yo he vivido, les deja huella y su confianza en tu capacidad creativa se multiplica exponencialmente.
El arquitecto dibujante
Yo llevo desde que tengo uso de razón haciendo garabatos, pero fueron el paso por la escuela de arquitectura, y mi formación como arquitecto, los elementos que me enseñaron a mirar. Dibujar para mí es consecuencia de saber mirar, observar, analizar un entorno que, según su morfología, características tectónicas, o incluso por los vacíos que tiene, evocan conceptos y generan sensaciones.
El dibujo es tan potente, que es capaz de transmitir esos conceptos abstractos que poseen los lugares a través del trazo, y en esa búsqueda ando metido ahora.
La idea principal es entender el dibujo como una imagen que construimos en nuestro cerebro, y que transmitimos directamente con la mano a un medio físico para compartirlo con los demás. La diferencia entre un dibujo que emocione y otro que no, no depende de la habilidad del dibujante, de lo real que sea capaz de dibujar un elemento, sino de la capacidad de transmitir que tenga. Por esto, para hacer dibujos expresivos, ya os digo que no hace falta ser un gran dibujante, pero sí un gran observador que elabore en su cerebro la imagen que quiere mostrar sobre lo que está viendo en el entorno.
Yo actualmente estoy en proceso de dibujar unas cuantas “perspectivas emocionantes” de la ciudad donde nací, Almería. El objetivo que persigo es, a través del trazo, crear una atmósfera en los dibujos que permita a quien lo vea viajar a esos lugares, y percibir las sensaciones y conceptos intrínsecos en el lugar, como pueden ser infinito, todo, nada, alegría, tristeza, vacío…. Y para este fin, utilizo dentro de la caja de herramientas que es el dibujo, elementos como profundidad, contraste, trazo, y sobre todo emoción.
La emoción es fundamental, porque el dibujo es algo mental, y si no sientes la emoción que quieres trasnmitir mientras dibujas, nadie va a percibirla en el dibujo. También influye la sinceridad, en ningún momento pretendo que los dibujos sean hiperrealistas (para eso sacaríamos una foto directamente), y eso añade una riqueza especial a las imágenes.
Arquitectura dibujada: Antigua estación de tren de Almería
Ahora, analicemos un ejemplo práctico de lo que he contado de dibujo que emocione, por ejemplo, uno que hice hace algunos meses, la antigua estación de tren de Almería.
¿Por qué este edificio?
En la escuela nos enseñan en la asignatura de dibujo a buscar edificios “bonitos” o “emblemáticos” que dibujar (CONSEJO: aprovechad y valorad TODO lo que os enseñen y expliquen en dibujo, yo en aquella época era muy novato y no me enteraba de mucho ni hacía por enterarme, y con el tiempo, viendo los apuntes que repartían, me he dado cuenta de que podría haber aprendido muchísima arquitectura –y expresión gráfica- si hubiera prestado más atención).
En lo que tal vez no se hace demasiado hincapié (hablo por mi experiencia siempre) es en que no es realmente importante dibujar perfectamente el capitel de una columna, sino analizar porqué está ese capitel ahí, qué hace una columna ahí, donde empieza y dónde termina, en resumen saber observar.
En el caso de la estación de tren, es un edificio al que los almerienses le tenemos respeto y cariño (aunque nadie mueva un dedo para restaurarla y reabrirla), y bueno, tiene una composición muy estudiada para actuar como edificio “telón de fondo” o al menos así lo aprecio yo. Su geometría evoca al sitio donde acaba la ciudad , cuyos raíles metálicos te sacan de la misma, además por supuesto del concepto de grandeza, monumentalidad.
Quiero destacar que estos conceptos dependen del lugar en el que está, ¡Almería! Si estuviéramos en Chicago, Madrid o Londres, evidentemente no evocaría estas ideas el edficio.
¿Cómo se dibuja este edificio?
Una vez elegido un edificio que transmite emociones, se elige una perspectiva que sea capaz de plasmarlas en la medida de lo posible. Para esto, busqué el sitio ideal, apoyé el móvil en el suelo (así podía fugar las líneas verticales, luego en el siguiente apartado de perspectiva explico porqué) y saqué la foto (tras varias pruebas claro), y ya en el tablero a echar horas dibujando. Es fundamental para hacer un buen dibujo establecer referencias o módulos y a partir de ellos medir distancias mas o menos. Aconsejo imprimir la foto o con el photoshop o similar, modular la imagen para tener una idea clara de cómo proporcionar. Esa modulación la trasnportamos a nuestro formato y a dibujar!.
En la foto, más allá del encanto del edificio y las sombras que pueda provocar la tarde en los volúmenes te percatas de la cantidad de elementos que son vitales y aportan realismo al dibujo. Son simplemente, barrotes, jardineras, carteles, señales de prohibido aparcar con coches justo debajo… una serie de elementos que llenan de vida la imagen y realmente, dan escala a la perspectiva y sitúan a quien ve el dibujo en ella.
Perspectiva
Respecto a la perspectiva, apuntar que busqué una que potenciara la “característica principal” del edificio, es decir, su horizontalidad, con un punto de fuga en el borde derecho del dibujo aproximadamente, y otro muy fuera (me llevó unos cuantos días los folios pegados con fixo a la mesa para conservar el punto de fuga..), encontré una perspectiva que además de marcar esa horizontalidad remarcaba la monumentalidad, y esta última cualidad, se ve exponencialmente plasmada gracias a la casi inapreciable, pero existente fuga de las líneas verticales.
El dibujo
El dibujo está encajado a lápiz, aunque detalles como ladrillos, carpinterías, etc están hechos ya directamente a tinta (con rotuladores calibrados finos y pilots v5 y 7). Una vez terminado de perfilar y/dar texturas a todo, en photoshop terminé de meter las sombras e hice el cielo, a mano, con la tableta digitalizadora. Lo bueno (y malo) que tiene trabajar con la tableta digitalizadora es que puedes corregir el dibujo pixel a pixel, y claro, esto te permite corregir algunos fallos, pero si eres muy perfeccionista te puedes tirar toda la vida corrigiendo con esta herramienta. También digo que es una herramienta difícil de manejar, a mí me ha costado empezar pero poco a poco voy cogiéndole el tranquillo.
Las sombras merecen comentario aparte, puesto que son lo típico que parece que no hace nada, pero aportan muchísimo al dibujo, sobre todo las que están en primer plano en el caso del ejemplo, cómo, sin aparecer en la imagen, tú ya sabes que a la derecha tienes una valla y unos mástiles enormes. Aparte, al estar fugadas, incrementan el realismo DEL AMBIENTE de la perspectiva. El cielo obviamente también lo hice con este tipo de trazo para potenciar la imagen de la estación, ese concepto de telón de fondo.
Espero que os haya gustado este artículo y os gusten los dibujos también.
Quiero agradecer a Pablo Domingo la oportunidad que me ha dado de publicar este post, sigo fielmente su blog y os recomiendo que leáis todos los artículos!
Podréis encontrar más información sobre mi trabajo en mi página de Facebook AXXI arquitectura y dibujo.